28.X.07 (1)
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El balance electoral es contradictorio…en las próximas cibercolumnas, daré mis impresiones sobre lo internacional, lo nacional, Risaralda , el área metro centro occidente y, finalmente, Pereira.
Tras 20 años de participar en elecciones…las primeras, recuerdo, fueron apoyando a Jaime Pardo Leal, en 1986, “frenteando” a nombre de la UP en Santa Rosa de Cabal, el único que estaba en la plaza del pueblo, con una mesita facilitada por un amigo de la UP, era yo...dos años después lo haría en Quinchía –ambas en Risaralda- ya en ese instante no había ni mesa …afortunadamente, hoy, después de muchos años, en ésta Colombia del siglo XXI de ese aspirante a “Nuñez” que es Uribe, no hay necesidad de mandar un “pelao” a la plaza de un pueblo a “frentear”por un movimiento de izquierda (presuntamente, democrático)… comenzaré, con ese acumulado, por algunas reflexiones, a propósito de la nueva reforma política que se tramita en el congreso de la república.
No sé en que lugar del mundo sucede, creo que en las democracias escandinavas…el día de las elecciones el elector no encuentra absolutamente a nadie, a ninguna distancia de la urna electoral que le diga por quién debe o no votar (“No vaya a votar por esa señora”…me dijeron en mi fila); de hecho en la semana anterior se ha decretado un sagrado “silencio electoral”…en donde se prohibe todo tipo de publicidad, he incluso creo que hay un país donde está absolutamente prohibido a los medios masivos referirse al tema. Una magnifica “semana de reflexión”. Obviamente, las encuestas se han restringido aún más, están prohibidas desde un mes antes (porque el CNC acertó, pero la pregunta es cuántas “orientó”…) y se castiga el publicarlas en esa semana, u horas antes, como aquí. En nuestra lenta democratización, la semana anterior al evento electoral es un chiste con una carcajada espeluznante el día de elecciones. Pero, esa semana, ese espacio de reflexión debería ser parte la nueva reforma política, así podríamos ser, un poco, tal vez sólo "un poco" más responsables los colombianos a la hora de votar.
El Día de elecciones, sigue siendo el más caro para quienes hacen política cercana a la honestidad –para los que no lo hacen, es la semana completa en la que se dedican a comprar “lideres” (lo pongo entre comillas porque un líder que se deje comprar: no lo es y de hecho deja de serlo: en política todo se sabe…)- . Ese día, se da una presencia masiva de “electoreros”, que son presuntos activistas pagos de los partidos (¿si tienen que pagar a los activistas: realmente es un partido al que pertenece, o una maquinaria electorera con intereses poco claros?) generalmente molesta, a la que se suman buses, Taxis, Refrigerios, Agua, etc, todo pago, todo dejando mucho que desear de la construcción de partidos. Esa situación tal vez se podría dar, pero a las 7 pm…(porque el horario, también es cierto, se podría extender, desde mi punto de vista la ciudadanía debería poder votar, de Sol a Sol…de 7 am a 7 pm…) y los jurados deberían tener sagradamente dividido el tiempo en que están en la mesa electoral- a esa hora deberían entrar los “testigos electorales” uno por cada partido, uno por cada mesa, a supervigilar el resultado electoral…un verdadero “ejército” de vigilantes: ojala mas capacitados que los mismos jurados, pues estos generalmente están allí de malagana, propensos a los errores -en Pereira en el escrutinio se invalidaron mas de 21.000 votos!!!- : el testigo, siendo un doliente partidario NO PAGO, supuestamente estaría allí, de “buena gana”…
Pero, el meollo del asunto en este país donde hemos tenido hasta un presidente, directa o indirectamente elegido por dineros de los narcotraficantes, otros elegidos directa o indirectamente por los para-políticos, todos, absolutamente todos, por los grandes grupos económicos, y todos, absolutamente todos, por las mega mafias de los mega contratos que sesionan en los exclusivos clubes bogotanos (las mafias de los contratos sesionan en todas partes y eligen gobernadores y alcaldes y...esa es la de la torta gigante: la del ponqué mayor...) …el meollo sigue siendo la financiación de las campañas…que se ha vuelto la cuadratura del círculo: ¿cómo hacer para que solamente pueda haber financiación del estado…para que aquel candidato que reciba dinero mediado por intereses de narcos, de paras, de guerrillas, de financistas y banqueros, de contratistas del estado, no pueda aspirar…pues no va a representar al pueblo que lo elige, sino, primero a si mismo y segundo a las oligarquías que los financian o de las que hacen parte?...tal vez un camino en ese sentido sea que algún congresista, de los buenos que hay -porque los hay- tenga los calzones para reglamentar el “lobby” y por ese camino, las “donaciones” que se hacen para las campañas…que no son "donaciones" en absolutamente ninguna parte del mundo: pues siempre hay un interés que defender de los donantes…en tanto ello no se resuelva, seguiremos asistiendo al enfrentamiento de maquinarias electorales, no de partidos, no de propuestas, no de ideas...donde unos acumulan 1.000 millones para una campaña, y la otra la enfrenta con 3.000, 4.000 o 5.000 millones y ¿a qué no saben quién gana?...
El balance electoral es contradictorio…en las próximas cibercolumnas, daré mis impresiones sobre lo internacional, lo nacional, Risaralda , el área metro centro occidente y, finalmente, Pereira.
Tras 20 años de participar en elecciones…las primeras, recuerdo, fueron apoyando a Jaime Pardo Leal, en 1986, “frenteando” a nombre de la UP en Santa Rosa de Cabal, el único que estaba en la plaza del pueblo, con una mesita facilitada por un amigo de la UP, era yo...dos años después lo haría en Quinchía –ambas en Risaralda- ya en ese instante no había ni mesa …afortunadamente, hoy, después de muchos años, en ésta Colombia del siglo XXI de ese aspirante a “Nuñez” que es Uribe, no hay necesidad de mandar un “pelao” a la plaza de un pueblo a “frentear”por un movimiento de izquierda (presuntamente, democrático)… comenzaré, con ese acumulado, por algunas reflexiones, a propósito de la nueva reforma política que se tramita en el congreso de la república.
No sé en que lugar del mundo sucede, creo que en las democracias escandinavas…el día de las elecciones el elector no encuentra absolutamente a nadie, a ninguna distancia de la urna electoral que le diga por quién debe o no votar (“No vaya a votar por esa señora”…me dijeron en mi fila); de hecho en la semana anterior se ha decretado un sagrado “silencio electoral”…en donde se prohibe todo tipo de publicidad, he incluso creo que hay un país donde está absolutamente prohibido a los medios masivos referirse al tema. Una magnifica “semana de reflexión”. Obviamente, las encuestas se han restringido aún más, están prohibidas desde un mes antes (porque el CNC acertó, pero la pregunta es cuántas “orientó”…) y se castiga el publicarlas en esa semana, u horas antes, como aquí. En nuestra lenta democratización, la semana anterior al evento electoral es un chiste con una carcajada espeluznante el día de elecciones. Pero, esa semana, ese espacio de reflexión debería ser parte la nueva reforma política, así podríamos ser, un poco, tal vez sólo "un poco" más responsables los colombianos a la hora de votar.
El Día de elecciones, sigue siendo el más caro para quienes hacen política cercana a la honestidad –para los que no lo hacen, es la semana completa en la que se dedican a comprar “lideres” (lo pongo entre comillas porque un líder que se deje comprar: no lo es y de hecho deja de serlo: en política todo se sabe…)- . Ese día, se da una presencia masiva de “electoreros”, que son presuntos activistas pagos de los partidos (¿si tienen que pagar a los activistas: realmente es un partido al que pertenece, o una maquinaria electorera con intereses poco claros?) generalmente molesta, a la que se suman buses, Taxis, Refrigerios, Agua, etc, todo pago, todo dejando mucho que desear de la construcción de partidos. Esa situación tal vez se podría dar, pero a las 7 pm…(porque el horario, también es cierto, se podría extender, desde mi punto de vista la ciudadanía debería poder votar, de Sol a Sol…de 7 am a 7 pm…) y los jurados deberían tener sagradamente dividido el tiempo en que están en la mesa electoral- a esa hora deberían entrar los “testigos electorales” uno por cada partido, uno por cada mesa, a supervigilar el resultado electoral…un verdadero “ejército” de vigilantes: ojala mas capacitados que los mismos jurados, pues estos generalmente están allí de malagana, propensos a los errores -en Pereira en el escrutinio se invalidaron mas de 21.000 votos!!!- : el testigo, siendo un doliente partidario NO PAGO, supuestamente estaría allí, de “buena gana”…
Pero, el meollo del asunto en este país donde hemos tenido hasta un presidente, directa o indirectamente elegido por dineros de los narcotraficantes, otros elegidos directa o indirectamente por los para-políticos, todos, absolutamente todos, por los grandes grupos económicos, y todos, absolutamente todos, por las mega mafias de los mega contratos que sesionan en los exclusivos clubes bogotanos (las mafias de los contratos sesionan en todas partes y eligen gobernadores y alcaldes y...esa es la de la torta gigante: la del ponqué mayor...) …el meollo sigue siendo la financiación de las campañas…que se ha vuelto la cuadratura del círculo: ¿cómo hacer para que solamente pueda haber financiación del estado…para que aquel candidato que reciba dinero mediado por intereses de narcos, de paras, de guerrillas, de financistas y banqueros, de contratistas del estado, no pueda aspirar…pues no va a representar al pueblo que lo elige, sino, primero a si mismo y segundo a las oligarquías que los financian o de las que hacen parte?...tal vez un camino en ese sentido sea que algún congresista, de los buenos que hay -porque los hay- tenga los calzones para reglamentar el “lobby” y por ese camino, las “donaciones” que se hacen para las campañas…que no son "donaciones" en absolutamente ninguna parte del mundo: pues siempre hay un interés que defender de los donantes…en tanto ello no se resuelva, seguiremos asistiendo al enfrentamiento de maquinarias electorales, no de partidos, no de propuestas, no de ideas...donde unos acumulan 1.000 millones para una campaña, y la otra la enfrenta con 3.000, 4.000 o 5.000 millones y ¿a qué no saben quién gana?...
Sigue---
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