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-parte 1 en http://ciberplural.blogspot.com/2007/03/generaciones-clientelismo-y-voto-de_14.html
Es curiosamente, Gaviria quien liderará el derrocamiento, también de Oscar Velez Marulanda, cristalizado cuando éste decide no acompañarlo en su aspiración presidencial y se consolida entonces “Unidad Liberal” orientado esencialmente por Juan Guillermo Ángel (descendiente de uno de los blancos que hablábamos la semana anterior) y otros. Es esta entonces la tercera (o cuarta) generación de dirigentes políticos del departamento durante el siglo XX: El Coronel-Camilo-Oscar-Gaviria/Ángel…Para ese entonces ya estamos en los 90 y el clientelismo, del que también hablamos en la pasada columna, se ha extendido como la forma básica de hacer política, no sólo, en Risaralda sino en la nación entera.
La constitución del 91 pocos cambios reales marcó en la dinámica política, pues más allá del carcelazo al Alcalde de Bogotá Caicedo Ferrer por el tema de los auxilios, la cancelación -por Gaviria- de la figura del Veedor del Tesoro Público (Veedor: no vea!, Orlando Parra, La Tarde, Junio 10 de 1993 (Haz Plural 1991-2003, Pereira, Pág. 49)) eliminó cualquier asomo de real control del uso de los dineros públicos, es decir del dinero “de todos”, en pos de intereses políticos, que son absolutamente individuales…más allá de la “pose”
Lo único que realmente cambiará a partir de la elección popular de alcaldes, y, posteriormente, de gobernadores, será que el poder lo tendrán cada vez menos lo poco que queda de las viejas estructuras partidarias representadas en los famosos directorios y cada vez más se concentrará en quienes detentan momentáneamente el poder en el ejecutivo bien sea municipal o departamental: La crisis de los partidos tradicionales se ahondará y el surgimiento de nuevos caciques (http://orlandoparrag.blogspot.com/2006/04/elecciones-pan-y-vino-3-risaralda-el.html) se hará inevitable, incluso se darán fenómenos cívicos de corta duración en pequeños municipios, perseguidos a muerte…y hasta la muerte (…) por los caciques destronados…y de largo aliento en las grandes ciudades, como Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla, donde el desarrollo económico de esas ciudades apuntalará el voto de opinión, el voto “no amarrado” al no depender de las maquinarias clientelistas aceitadas con los recursos del estado…
Ángel paulatinamente cederá el terreno a Rodrigo Rivera Salazar y a su séquito, dándose un cambio de nombre, de persona, pero no de estilo. Así se consolida la última generación del siglo XX y la primera del XXI. Del sequito de Ángel sobrevivirá Diego Patiño Amariles. Es en ese escenario donde emerge la figura del Bugueño Juan Manuel Arango Vélez.
Arango Vélez es el resultado lógico de todo el proceso que hemos venido ilustrando. Su extendida clientela es manejada a la perfección: se fabrican desde micro hasta macro dependencias. Su paso, en dos ocasiones, por la alcaldía de Pereira, con el mayor presupuesto público en el departamento y hasta en la región, lo ha consolidado. Su capacidad para asumir las actitudes populistas de los caciques que lo han antecedido, entre otras, lo han puesto como una ficha central del ajedrez político del momento. Pero, nuevamente, tal cual ha sucedido, y tal cual lo sabe él, quien parece ser un asiduo lector de historias biográficas de dirigentes: no hay reinado que dure para siempre. El actual proceso electoral ha puesto en un aprieto a Arango Vélez: aún, a pesar de claramente merecerlo, no es una figura que pueda dar el salto a lo nacional y desprenderse con delicadeza de lo local, como lo hicieron, en su debido momento, Ángel y Rivera; pero es consciente de que dos candidatos a la alcaldía de Pereira, clientelista-mente, también, cercanos a él…simbolizan abiertamente el normal proceso de renovación, de cambios generacionales: los señores Santa y Londoño, por ello ha decidido aferrarse al poder con un candidato de su entera confianza. Si es que la “confianza entera” existe en política.
Tal vez Juan Manuel se siente atrapado por la propia maquinaria que él no creo, pero si desarrolló; tal vez no sea consciente de que más allá de las prebendas, ha despertado, en una buena cantidad de dirigentes y de ciudadanos, una actitud hacia él como líder mismo, que lo beneficiará electoralmente, con o sin el presunto control del estado local; tal vez olvido que se hizo re-elegir como alcalde, en contra de quienes detentaban la administración, probando así, desde ese entonces, que no necesitaba tener alcalde para continuar su carrera política; tal vez ha olvidado que el relevo generacional, casi siempre, es beneficioso; que Duque no fue el títere que él esperaba cuando logró que lo sucediera; que éste no pudo imponer su candidato, que la alcaldesa siguiente tampoco pudo imponer la suya, que, entonces, "cero y van dos" seguidas; y que, tal vez, esas situaciones muestran que, como es normal en las ciudades en crecimiento, viene emergiendo y se hace cada vez mas decisorio, el voto de opinión, en este caso, en la ciudad-centro-región-occidental: PEREIRA…o tal vez, si es consciente en parte o en todo…
El ajedrez político muestra entonces en Pereira a dos grandes bloques en disputa. Arango con Baena por un lado y los miembros del "Pacto del Comercio" con Santa y otros en la esquina contraria. En el centro de ese cuadrilátero, casi como Árbitro se encuentra el candidato de ese suprapartidismo curioso que se reúne en torno al partido de la U: Israel, el hombre de la http://www.fuerzai.com/. Juan Manuel tiene claro que su gran juego es la división: es una máxima anterior a Maquiavelo: “divide y reinaras” y sabe que su peor escenario, precisamente, sería aquel en el que se consolidara la unión del Pacto del Comercio: lo que muy seguramente suceda, con un solo candidato o que, incluso, en algún momento de acá a Agosto-Septiembre-Octubre se de una unión entre estos y quien se ha ubicado en el centro; lo cual intentará, por todos los medios, que no suceda…
Esa es la partida, y, apenas comienza: es una lucha entre Generaciones, donde los instrumentos esenciales, son el clientelismo (sumado al neo-clientelismo) y el voto de opinión: y dónde ganará quien mejor sepa combinarlos...
Es curiosamente, Gaviria quien liderará el derrocamiento, también de Oscar Velez Marulanda, cristalizado cuando éste decide no acompañarlo en su aspiración presidencial y se consolida entonces “Unidad Liberal” orientado esencialmente por Juan Guillermo Ángel (descendiente de uno de los blancos que hablábamos la semana anterior) y otros. Es esta entonces la tercera (o cuarta) generación de dirigentes políticos del departamento durante el siglo XX: El Coronel-Camilo-Oscar-Gaviria/Ángel…Para ese entonces ya estamos en los 90 y el clientelismo, del que también hablamos en la pasada columna, se ha extendido como la forma básica de hacer política, no sólo, en Risaralda sino en la nación entera.
La constitución del 91 pocos cambios reales marcó en la dinámica política, pues más allá del carcelazo al Alcalde de Bogotá Caicedo Ferrer por el tema de los auxilios, la cancelación -por Gaviria- de la figura del Veedor del Tesoro Público (Veedor: no vea!, Orlando Parra, La Tarde, Junio 10 de 1993 (Haz Plural 1991-2003, Pereira, Pág. 49)) eliminó cualquier asomo de real control del uso de los dineros públicos, es decir del dinero “de todos”, en pos de intereses políticos, que son absolutamente individuales…más allá de la “pose”
Lo único que realmente cambiará a partir de la elección popular de alcaldes, y, posteriormente, de gobernadores, será que el poder lo tendrán cada vez menos lo poco que queda de las viejas estructuras partidarias representadas en los famosos directorios y cada vez más se concentrará en quienes detentan momentáneamente el poder en el ejecutivo bien sea municipal o departamental: La crisis de los partidos tradicionales se ahondará y el surgimiento de nuevos caciques (http://orlandoparrag.blogspot.com/2006/04/elecciones-pan-y-vino-3-risaralda-el.html) se hará inevitable, incluso se darán fenómenos cívicos de corta duración en pequeños municipios, perseguidos a muerte…y hasta la muerte (…) por los caciques destronados…y de largo aliento en las grandes ciudades, como Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla, donde el desarrollo económico de esas ciudades apuntalará el voto de opinión, el voto “no amarrado” al no depender de las maquinarias clientelistas aceitadas con los recursos del estado…
Ángel paulatinamente cederá el terreno a Rodrigo Rivera Salazar y a su séquito, dándose un cambio de nombre, de persona, pero no de estilo. Así se consolida la última generación del siglo XX y la primera del XXI. Del sequito de Ángel sobrevivirá Diego Patiño Amariles. Es en ese escenario donde emerge la figura del Bugueño Juan Manuel Arango Vélez.
Arango Vélez es el resultado lógico de todo el proceso que hemos venido ilustrando. Su extendida clientela es manejada a la perfección: se fabrican desde micro hasta macro dependencias. Su paso, en dos ocasiones, por la alcaldía de Pereira, con el mayor presupuesto público en el departamento y hasta en la región, lo ha consolidado. Su capacidad para asumir las actitudes populistas de los caciques que lo han antecedido, entre otras, lo han puesto como una ficha central del ajedrez político del momento. Pero, nuevamente, tal cual ha sucedido, y tal cual lo sabe él, quien parece ser un asiduo lector de historias biográficas de dirigentes: no hay reinado que dure para siempre. El actual proceso electoral ha puesto en un aprieto a Arango Vélez: aún, a pesar de claramente merecerlo, no es una figura que pueda dar el salto a lo nacional y desprenderse con delicadeza de lo local, como lo hicieron, en su debido momento, Ángel y Rivera; pero es consciente de que dos candidatos a la alcaldía de Pereira, clientelista-mente, también, cercanos a él…simbolizan abiertamente el normal proceso de renovación, de cambios generacionales: los señores Santa y Londoño, por ello ha decidido aferrarse al poder con un candidato de su entera confianza. Si es que la “confianza entera” existe en política.
Tal vez Juan Manuel se siente atrapado por la propia maquinaria que él no creo, pero si desarrolló; tal vez no sea consciente de que más allá de las prebendas, ha despertado, en una buena cantidad de dirigentes y de ciudadanos, una actitud hacia él como líder mismo, que lo beneficiará electoralmente, con o sin el presunto control del estado local; tal vez olvido que se hizo re-elegir como alcalde, en contra de quienes detentaban la administración, probando así, desde ese entonces, que no necesitaba tener alcalde para continuar su carrera política; tal vez ha olvidado que el relevo generacional, casi siempre, es beneficioso; que Duque no fue el títere que él esperaba cuando logró que lo sucediera; que éste no pudo imponer su candidato, que la alcaldesa siguiente tampoco pudo imponer la suya, que, entonces, "cero y van dos" seguidas; y que, tal vez, esas situaciones muestran que, como es normal en las ciudades en crecimiento, viene emergiendo y se hace cada vez mas decisorio, el voto de opinión, en este caso, en la ciudad-centro-región-occidental: PEREIRA…o tal vez, si es consciente en parte o en todo…
El ajedrez político muestra entonces en Pereira a dos grandes bloques en disputa. Arango con Baena por un lado y los miembros del "Pacto del Comercio" con Santa y otros en la esquina contraria. En el centro de ese cuadrilátero, casi como Árbitro se encuentra el candidato de ese suprapartidismo curioso que se reúne en torno al partido de la U: Israel, el hombre de la http://www.fuerzai.com/. Juan Manuel tiene claro que su gran juego es la división: es una máxima anterior a Maquiavelo: “divide y reinaras” y sabe que su peor escenario, precisamente, sería aquel en el que se consolidara la unión del Pacto del Comercio: lo que muy seguramente suceda, con un solo candidato o que, incluso, en algún momento de acá a Agosto-Septiembre-Octubre se de una unión entre estos y quien se ha ubicado en el centro; lo cual intentará, por todos los medios, que no suceda…
Esa es la partida, y, apenas comienza: es una lucha entre Generaciones, donde los instrumentos esenciales, son el clientelismo (sumado al neo-clientelismo) y el voto de opinión: y dónde ganará quien mejor sepa combinarlos...
(automatic translation+autor)
GENERATIONS CLIENTELISM AND VOTE OF OPINION (II)
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ALSO giving clik IN: http://ciberplural.blogspot.com/2007/03/generaciones-clientelismo-y-voto-de_22.html
It is peculiarly, Gaviria that will lead the overthrow, of Oscar Velez Marulanda, also crystallized when this one decides not to accompany it in its presidential aspiration and then “Liberal Unit” oriented by Juan consolidates essentially Guillermo Angel (descending of one of the targets that we spoke the previous week) and others. It is the this then third (or fourth) generation of political leaders of the department during century XX: The Colonel-Camilo-Oscar-Gaviria/Angel…
For that then ones already we are in the 90 and the clientelism, of which also we spoke in the last column, has extended as the basic form to make policy, not only, in Risaralda but in the whole nation. The constitution of the 91 few real pars marked in political dynamics, because beyond carcelazo to the Mayor of Bogota Caicedo Ferrer by the subject of the aid, the cancellation - by Gaviria- of the figure of the Veedor of the Public Treasure (Veedor: it does not see! , Orlando Parra, La Tarde, June 10 of 1993 (Haz Plural 1991-2003, Pereira, p 49 Plural)) it eliminated nobody I show of real control of the use of the money public, that is to say, of the money “of all”, after political interests, that are absolutely individual… beyond the “pose”
The only thing which really it will change from the popular election of mayors, and, later, of governors, will be that the power will have it less and less little that is of the old represented in favor structures in the famous directories and more and more it will be concentrated in those who momentarily hold the power in the executive or is departmental policeman or: The crisis of the traditional parties will go deep and the sprouting of new caciques (http://orlandoparrag.blogspot.com/2006/04/elecciones-pan-y-vino-3-risaralda-el.html) will become inevitable, will even occur civic phenomena of short duration in small municipalities, persecuted until death… and until the death (…) by the overthrown caciques… and of long breath in the great cities, like Bogota, Medellín, Cali, Barranquilla, where the economic development of those cities will prop up the opinion vote, the not moored vote “not moored ” when not depending on the oiled clientelistas machineries with the resources of the state…
Angel gradually will yield the land to Rodrigo Rivera Salazar and his small cut, occurring a name change, of person, but not of style. Thus the last generation of century XX and first of the XXI consolidates. Of the sequito of Angel, Diego Patiño Amariles will survive.
He is in that scene where the figure emerges from the Bugueño Juan Manuel Arango Vélez. Arango Vélez is the logical result of all the process that we have come illustrating. His extended customer it is handled perfectly: dependencies make from micro to macro. Its step, in two occasions, by the mayorship of Pereira, with the greater public budget in the department and until in the region, has consolidated it. Their capacity to assume the attitudes Populists of the caciques who have preceded it, among others, has put it like a central card of the political chess of the moment. But, again, so as it has happened, and so as he knows to it, who seems to be a reading regular of biographical histories of leaders: there is no reign that lasts for always. The present electoral process has put in a jam to Arango Vélez: still, in spite of deserving it clearly, it is not a figure that can give the jump to the national and be given off with gentleness of the premises, since they did it, at its due moment, Angel and Creek; but he is conscious that two candidates to the mayorship of Pereira, clientelista-mind, also, near him… openly symbolize the normal process of renovation, of generational changes: the gentlemen Santa and Londoño, for that reason have decided to cling to the power with a candidate of their whole confidence. If it is that the “whole confidence” exists in policy.
Perhaps Juan Manuel feels catched by the own machinery that he I do not create, but developed; perhaps he is not conscious that beyond prebendas, he has waked up, in a good amount of leaders and citizens, an attitude towards him like same leader, that will benefit it electoral, with or without the presumed control of the local state; perhaps forgetfulness that was made reelect like mayor, against those who held the administration, thus proving, from that then, that did not need to have mayor to continue its political race; perhaps it has forgotten that the generational relief, almost always, is beneficial; that Duque was not the puppet that he waited for when he obtained that he happened it; that this one could not impose its candidate, who the following mayoress could not either impose hers, that, then, “zero and go two” followed; and that, perhaps, those situations show that, as is normal in the cities in growth, it comes emerging and it is made decision-making more and more, the opinion vote, in this case, the city-center-region-western one: PEREIRA… or perhaps, if he is conscious partly or in everything…
The political chess then sample in Pereira to two great blocks in dispute. Arango with Baena on the one hand and the members of the “Pact of Comercio” with Santa and others in the opposite corner. In center of that quadrilateral, almost as Referee is the candidate of that peculiar suprapartisanship that meets around the party of the U: Israel, the man of http://www.fuerzai.com/ . Juan Manuel knows clearly that its great game is the division: it is a Maxima previous to Maquiavelo: “he divides and you reigned” and knows that its worse scene, indeed, would be that in which the union of the Pact of Comercio consolidated: what very surely he happens, with a single candidate or who, even, at some time of to August-September-October of a union between these and who has been located here in center; which will try, at all costs, that does not happen…
That is the game, and, as soon as it begins: it is a fight between Generations, where the essential instruments, are the clientelism (added to the neon-clientelism) and the vote of opinion: and where it will win who better knows to combine them…
me gusto mucho el escrito, gente como ud. con una tendencia definida, analice las cosas politicas sin ningun rasgo de ella.
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