2015/05/28

Hijos, hijas... ¿para qué?

El domingo leí tres columnas en los dos diarios locales…pues, leí más, pero hubo 3 que me llamaron la atención. Me han dicho que pase ésta columna p’al domingo, he dicho que no, que quien la va a leer la lee el día que sea o la pide a ciberplural@gmail.com . Pero el tema no es ese, el tema hoy es la paternidad.

La columna de Cavisa, en LaTarde es de las más fuertes que he leído. Poco más y me pongo a… leer la carta al padre de Kafka http://es.wikipedia.org/wiki/Carta_al_padre (a propósito: ¿usted es papá? Ó ¿qué es de su padre?) …y me hizo sentir -eso de “pensar” cada vez está más en desuso- sobre la forma en que nos relacionamos con nuestros padres, y con nuestros hijos. Una relación que marca –como lo escribió Kafka en 1919- nuestras vidas. Para bien, para mal, para una mezcla, pero está ahí, presente en nuestras vidas, en nuestro “subteniente”.
Cavi me llevaste a preguntarme si Don Tiberio me ha dicho, ha “verbalizado” a sus 82 años un “te amo hijo” y sabes, creo que tampoco ¡ya somos dos! –sonora carcajada- no hombre! la verdad es que somos miles, millones: la generación de nuestros padres en general nunca dijo ni dice ni dirá “te amo” para ellos eso de hombre a hombre es “maricongo”, de pronto a las hijas... vos y yo que le decimos a nuestros hijos “te amo”, en el fondo, para ellos, somos partidarios de ¡Guiovanny Cano al concejo!.. Es su vida Cavisa, así se criaron, y con las Delias es lo mismo, esas señoras son igualitas ¡y claro que nos aman!... a su manera: así como nosotros amamos a la nuestra, y seguramente nuestros hijos y nietos amen a la de ellos ¿un beso virtual? ¿una caricia digital?...

He leído (leo “algo” así como usted) sobre varias personas que reflexionan al final de sus vidas, en su lecho de muerte -los que tienen esa fortuna: la de morir en un lecho-…allí en ese momento sólo les importan una cosa: ¡sus hijos!. Todo lo demás es lo que es: ¡nada!. La obra al final de la vida son esos seres: esa es “la tarea” que Dios/Universo nos puso. Una tarea que es un chicharrón de varias patas. Pero así es. Y una tarea que además aplica una sentencia humana: el único animal que nunca aprende por experiencia ajena es el homínido bípedo llamado homo sapiens -que en general es homo brutus- Nuestros padres y nosotros llegamos hasta donde podemos con nuestros hijos e hijas: cada quien ha de vivir (y morir) lo que le corresponde.
Cavi, nuestros padres merecen ser citados porque supieron cumplir con la tarea de paternar; aquellos que tuvieron hijos y nunca se ocuparon (u ocupan) por su crianza espiritual, emocional y física –en ese orden- nunca han merecido ser citados…
¿Y Usted? ¿Está a tiempo de hacer esa llamada? ¡Dele! ¡hágala!
FRASE POSITIVA: “Es mejor tener bandas musicales en los barrios y no bandas delincuenciales” Adriana Vallejo de la Pava

2015/05/21

¿vos tenes destornillador?

El destornillador....

Antier al caer la tarde hacía un calor absurdo: unos 27 grados. Entré al Apostar de la 20 con 5ª a pagar los servicios y en segundos en el semáforo una moto golpeó a un taxi y se armó la “grosería” entre el taxista y el motociclista. Luego la agresión física y el taxista terminó enterrándole al Motociclista un destornillador… ¡en segundos! ¡Qué les parece?...
El año pasado hubo 11 mil asesinados en Colombia. Hay países donde hay menos de 11 al año. Pero acá es peor: De esos 11 mil unos seis mil asesinados lo fueron por intolerancia, es decir de cada 11 asesinatos 6 fueron porque…
* un hombre fue hasta la casa de un vecino a pedirle disculpas por una riña que habían tenido el domingo pasado y éste en lugar de conciliar, le propinó un disparo en el tórax.
* un campesino le dio muerte a un vecino por haberle cambiado la canción que estaba escuchando en un establecimiento.
* mató con sus propias manos a su vecino de 80 años, que al parecer, era algo malgeniado.

El tema es complejo…mucho…según el Ministerio de Salud, de cada diez Colombianos (haga el ejercicio de imaginarse 10 personas agrupadas, incluido usted…) de esos 10, cuatro…sí 4…sufren de algún trastorno mental… O sea que en ese grupo que usted armó, usted y otros tres posiblemente tienen trastornos mentales…¿y porqué yo? dirá su merced. Pues porque realmente, si bien hemos avanzado, seguimos violando varias reglas…
-¿Por cada ocho horas de trabajo o estudio, destinas una hora para el esparcimiento? ¿con actividades que impliquen acción, movimiento, de manera que se pueda eliminar el estrés? (…¡Una cosa es Bailar…y otra sentarse a tomar trago!...) Si_ No_
- ¿Haces un corte en la rutina? ¿Antes de ir para la casa? ¿De tal manera que rompes la rutina casa/trabajo? Si_ No_
-¿Tienes unas dos horas diarias de actividad sana? (¿si?...defina “sana”) Si_ No_
-¿Tenes una afición, algo que hagas sólo por placer: cero obligación? Si_ No_
-¿ Cuentas con uno o más confidentes para no “cargarte” mucho y poder desahogarte? Si_ No_
-¿Cero dificultades en pedir cita con un psicólogo o psiquiatra? Si_ No_
-¿Duermes bien? ¿unas seis a 8 horas? ¿pero de noche?... Si_ No_
Siete… de las siete a cuantas le “pegó”…si es a menos de 4, según los expertos, puedes estar ya dentro de esos cuatro del grupo de diez que formaste…
umhh…¿ya guardaste el destornillador?...
LA FRASE POSITIVA: “Me parece importante lo que está haciendo la Directora de Tránsito…Es un ejemplo a seguir para las personas cuyo trabajo es controlar...” Adrián Zuluaga Duque, Empresario

2015/05/16

Un premio NACIONAL debe ser Nacional... o no? Señores @PNPSimonBolivar

Señores @PNPSimonBolivar cc @colombiahoy @patynietog @marco_schwartz (los demás jurados No los encontré)

Escribo ésta nota con algo de desgano...
pero en fin... escribámosla... nada se pierde y la peor gestión es la que se deja de hacer...

Hace poco oí al presidente nacional de FENALCO decir una frase que ya había oído en personas que como el recorren este país constantemente: Colombia es un país de regiones.

El señor tiene razón. Y por ende el premio "nacional" del que ustedes son jurados, carece de ella.

Voy a hacerles una sola "consideración" ...¿cuántos indígenas han ganado ese premio?...¿cuántos afros?... o si quieren lo extendemos ¿campesinos?... No hay "periodistas" de ese tipo...?...o simplemente los invisibilizamos...

ahora bien...tampoco se trata de cubrir el sol con un dedo... claro que se pueden seguir premiando los medios que cubren -bien regular mal o cínicamente- el devenir nacional... pero creo que es hora de que ese premio reconozca que hay periodistas NO sólo en Bogotá, ni mucho menos sólo en las 3 4 5 grandes ciudades de Colombia...¡la nación seeeemos todos! (así "seeemos")

¿porqué no existen otras categorías? ¿porqué no hay tres categorías acorde con el tamaño de la población? ejemplo http://lasillavacia.com/historia/los-periodistas-que-mueven-la-opinion-46038 ...esa puede ser la segunda... pero una tercera debe llegar a los municipios más pequeños...a sus veredas...¿o es que allí NO hay periodistas?... ¡claro que los hay!...

En fin...como lo dije...ésta es una nota escrita con desgano: dudo mucho que ustedes sean capaces de poner su grano de arena al reconocimiento de la nación que "seemos"...

queda hecha la gestión...

Un abrazo. 
publicada originalmente en twitter: https://twitter.com/OrlandoParraG/status/599613005698072576
en formato http://www.twitlonger.com/show/n_1sm7v5g 

2015/05/14

Lo extorsiona un "periodista" ...?...grabelo...y DENUNCIELO POR EXTORSION!

Extorsionistas que avergüenzan al periodismo

El maestro Hernán Castaño Hincapié, Jefe de Redacción emérito de LaTarde y en cuya memoria existe un premio regional, decía que “el periodismo es un apostolado”. Enseñaba a sus discípulos a consagrarse a sus deberes por “vocación”, nunca por “ambición”. Recalcaba la gran responsabilidad social que reposa tras las palabras impresas o pronunciadas en la radio y la televisión e invitaba a obrar siempre con el más profundo respeto hacia el público.
Pero antes y después de los grandes comunicadores como Don Hernán, han existido en el mundo sujetos que irrespetan su legado de honestidad y se valen de la plataforma privilegiada de los medios de comunicación para extorsionar y enriquecerse.
Presionan a sus víctimas con calumnias sistemáticas. Las pisotean, humillan y sofocan para forzarlas a pagar por anuncios que no habían contratado previamente. Los funcionarios públicos son los más vulnerables; por miedo a ser excluidos de la carrera administrativa o por la necesidad de conservar una buena imagen si algún día optan por lanzarse a la política, se ven inducidos a contratar pauta sin otra consideración distinta al temor.
La Corte Constitucional dice que la libertad de opinión es un derecho con límites. Por ningún motivo se puede considerar absoluto. “No puede entenderse que quien hace uso de esta libertad está autorizado para atropellar los derechos de los otros miembros de la comunidad, sacrificando entre otros, los derechos al buen nombre y la honra”, sostiene en la sentencia T-110 de 2015, con ponencia del Magistrado Jorge Iván Palacio.
Los agredidos son tímidos. Guardan silencio. Prefieren evitar que el maleante “se ensañe”. En el mejor de los casos formulan denuncias por injuria y calumnia, cuya modesta pena mínima de 16 meses permite que raras veces los delincuentes terminen encerrados. Además, las condenas son pocas.
Existe una alternativa mejor para defenderse. Cuando un empresario o un servidor del Estado sea objeto de ataques por parte de algún periodista o columnista que se valga de mentiras para constreñirlo con el fin de obtener a cambio prebendas o pagos indebidos, puede considerar la posibilidad de denunciarlo por el delito de extorsión. La pena va de 192 meses (16 años) a 288 meses (24 años) de prisión y no admite excarcelación. ¡Eso sí les duele a los hampones!.
La única forma de obligar a los deshonestos a respetar la dignidad de los sagrados derechos de información y opinión es poniéndolos tras las rejas.

publicada en http://www.latarde.com/opinion/columnistas/juan-fernando-gonzalez-g/150669-extorsionistas-que-avergueenzan-al-periodismo

La Remigio y… ¿Gobierno?

Hoy, bajo la dirección de Adriana Vallejo y Paula Zamora se conmemoran 25 años de la RAC 97.7 FM con un concierto para piano de Teresita Gómez en el Santiago. ¡Excelente!.

***
“Acción y efecto de gobernar o gobernarse”…. para eso, supuestamente, se tiene en cada ciudad una Secretaria de Gobierno. ¿Qué nos ha pasado en Pereira?...en 3 años largos vamos en cuatro secretarios…¿así de difícil es la tarea de gobernar: Mandar con autoridad o regir algo; Dirigir una colectividad; Guiar y dirigir; ejercer una fuerte influencia; Componer, arreglar; Regirse según una norma, regla o idea?...¿es la ciudad, sus ciudadanos, usted y yo, tan “jodidos”?

Lo primero que habría que aclarar es que quien finalmente toma las decisiones más complejas, generalmente, NO es quien está sentado en la silla de secretario de gobierno, sino el alcalde. Ojo: aquí y en cualquier parte de Colombia. Y los alcaldes generalmente deciden reflejando una balanza de intereses: de los concejales, congresistas, ciudadanos que ejercen su función ciudadana (Veedurías, Gremios por ejemplo), personajes, y …finalmente de lo que piensen ellos mismos. De entrada entonces debería tener otro nombre: ¿Secretaria Ejecutiva de Gobierno?...

Así, cada vez que vemos tomar una decisión o dejar de tomarla (…), es un reflejo de esa mezcla de intereses expresada por el alcalde o por su secretario (ejecutivo) de Gobierno. Secretarios muchas veces sin preparación técnica o sin las capacidades y que consideran ese cargo como herramienta de “favores” electorales para ser alcalde: ¡el desastre!. Ejemplo, recién uno de ellos  pretendía quedar bien tanto con dueños de bares y con las veedurías Mucho ruido y Circunvalar: eso es imposible: el estado, por mandato constitucional, debe, siempre, privilegiar los intereses del común, de las mayorías, sobre los de los individuos. Es el deber ser.

El problema se agudiza en Pereira cuando tenemos un engendro llamado Secretaria de Gobierno pues quien asume ese cargo obtiene varios “chicharrones” simultáneos: debe ser el “ejecutivo” de bomberos, de control físico, de espacio público: donde está limitado por lo que decidan otros secretarios; de establecimientos, de la UPPV, inspecciones de policía,  seguridad : una seguridad que tampoco controla pues la policía es nacional…vuelva y lea si quiere… y claro es un batallón de funcionarios y contratistas: son seis funciones vitales de ciudad mezcladas cual bulto de anzuelos… ¿cómo la ve-lee?...¿usted cree que además de cruzar todos los intereses anotados, poner en marcha esos anzuelos, es fácil?...

¿Qué hacer?...primero, antes de criticar, es necesario entender un poco…y si va a criticar –una recomendación para la vida-  proponga, planteé soluciones…segundo: señores concejales: ¿es justo que la ciudad continúe con ese atraso administrativo porque estamos, otra vez, en campaña?¿que el alcalde que viene herede ese monstruo?...Hay que –sin crear un solo cargo: salvo el de secretario/responsable- reemplazar ese monstruo y establecer 

1º La UNIFICACIÓN de funciones/funcionarios/contratistas en un Instituto/Secretaria de Espacio Público y Cultura Ciudadana. 

2º La secretaria de seguridad y convivencia (articulando inspecciones + bomberos + UPPV) 

3º Tercerizar –como en otras ciudades- control físico ( clientelizado/politizado como está ¡jamás va a funcionar!) …

si ello se sigue aplazando…el ciudadano Fernando Agudelo Velazco reencarnará y todo estará igual o píioor!! 

2015/05/11

una nueva aspiración a la igualdad social y económica, así como a la solidaridad internacional, es necesaria.

¿Qué pasó con el consenso de 1945?

La vuelta a casa de la generación que peleó la guerra significó

un cambio en el pensamiento

El 8 de mayo de 1945, cuando acabó oficialmente la Segunda Guerra Mundial en Europa, gran parte del planeta estaba en ruinas, pero, si bien la capacidad humana de destrucción no conoce límites, la de volver a empezar es igualmente notable. Tal vez sea esa la razón por la que la humanidad ha logrado sobrevivir hasta ahora.
Al final de la guerra millones de personas estaban demasiado hambrientas y exhaustas para hacer algo más que permanecer vivas, pero, al mismo tiempo, una ola de idealismo, una sensación de determinación colectiva de construir un mundo más igual, pacífico y seguro, barrió las ruinas.

Esa es la razón por la que el gran héroe de la guerra, Winston Churchill, perdió las elecciones en el verano de 1945, antes incluso de que Japón se rindiera. Los hombres y las mujeres no habían arriesgado sus vidas simplemente para volver a la época anterior de privilegios de clase y privación social. Querían mejores viviendas, educación y salud gratuita para todos.
Exigencias similares se oían en toda Europa, donde la resistencia antinazi o antifascista estaba encabezada con frecuencia por izquierdistas o, de hecho, comunistas, y los conservadores de la preguerra estaban a menudo manchados por la colaboración con regímenes fascistas. En países como Francia, Italia y Grecia se hablaba de revolución. Esta no ocurrió, porque ni los aliados occidentales ni la URSS la apoyaron. Stalin se contentó con un imperio en Europa oriental.
Charles de Gaulle, dirigente derechista de la Resistencia, tuvo que aceptar a comunistas en su primer gobierno de posguerra y nacionalizó industrias y bancos. La inclinación hacia la izquierda, hacia los Estados del bienestar socialdemócratas, se dio en toda la Europa occidental. Formó parte del consenso de 1945.
En las excolonias de Europa en Asia, donde los nativos no deseaban ser gobernados una vez más por potencias occidentales, que habían sido tan ignominiosamente derrotadas por Japón, estaba produciéndose un tipo diferente de revolución. Vietnamitas, indonesios, filipinos, birmanos, indios y malayos querían libertad también.
Esas aspiraciones se expresaron con frecuencia en las Naciones Unidas, fundadas en 1945. La ONU, como el sueño de unidad europea, formó parte del consenso de 1945. Durante un período breve, muchas personalidades (Albert Einstein, por ejemplo) consideraron que sólo un gobierno mundial podría garantizar la paz del planeta.
Ese sueño se desvaneció rápidamente cuando la Guerra Fría dividió al mundo en dos bandos hostiles, pero en ciertos sentidos el consenso de 1945 en Occidente resultó fortalecido por esa política. El comunismo, aún envuelto en la hoja de laurel del antifascismo, tenía un gran atractivo intelectual y emocional, no solo en el llamado Tercer Mundo, sino también en la Europa occidental. La democracia social, con su promesa de mayor igualdad y oportunidades para todos, hizo de antídoto ideológico. En realidad, la mayoría de los socialdemócratas eran feroces anticomunistas.
70 años después, gran parte del consenso de 1945 no ha sobrevivido. Pocos pueden hacer un gran acopio de entusiasmo por las Naciones Unidas. El sueño europeo está en crisis y cada día se socava más el Estado del bienestar socialdemócrata de la posguerra.
La degradación comenzó durante el decenio de 1980, con Ronald Reagan y Margaret Thatcher. Los neoliberales atacaron el gasto en programas de derechos sociales y los intereses de los sindicatos. Se pensaba que los ciudadanos debían adquirir una mayor capacidad para valerse por sí mismos; los programas de asistencia social estatales estaban volviendo a todo el mundo blando y dependiente. Conforme a las famosas palabras de Thatcher, no existía la llamada ‘sociedad’; solo familias y personas que debían responsabilizarse de su propia vida.
Pero el consenso de 1945 recibió un golpe mucho mayor precisamente cuando nos alegrábamos del desplome del imperio soviético, la otra gran tiranía del siglo XX. En 1989, parecía que la siniestra herencia de la Segunda Guerra, la esclavización de la Europa oriental, se había acabado por fin y así había sido en muchos sentidos, pero muchas más cosas se desplomaron con el modelo soviético. La socialdemocracia perdió su razón de ser como antídoto del comunismo. Se llegó a considerar que todas las formas de ideología izquierdista (de hecho, todo lo que oliera a idealismo colectivo) eran un utopismo equivocado que solo podía acabar en el gulag.
El neoliberalismo llenó el vacío, creando una gran riqueza para algunos, pero a expensas del ideal de igualdad que había surgido tras la guerra. La extraordinaria acogida dada a El capital en el siglo XXI, de Thomas Piketty, muestra cuán profundas se han sentido las consecuencias del desplome de la izquierda.
En los últimos años, otras ideologías han surgido para colmar la necesidad humana de ideales colectivos. El ascenso del populismo de derecha refleja unos anhelos redivivos de comunidades nacionales puras que mantengan fuera a los emigrantes y las minorías. Y el neoconservadurismo americano ha transformado perversamente el internacionalismo de la antigua izquierda al intentar imponer un orden democrático del mundo mediante la fuerza militar de EE. UU.
La respuesta a esa alarmante evolución no es la nostalgia. No podemos regresar al pasado. Demasiadas cosas cambiaron, pero una nueva aspiración a la igualdad social y económica, así como a la solidaridad internacional, es necesaria. No puede ser lo mismo que el consenso de 1945, pero en este aniversario haríamos bien en recordar por qué surgió aquel consenso, para empezar.
IAN BURUMA
Profesor de democracia, derechos humanos y periodismo en el Bard College y autor de ‘Year Zero: A History of 1945’ (‘El año cero: historia de 1945’).
Nueva York.
© Project Syndicate

2015/05/08

Así va el cese al conflicto armado en Colombia. A Mayo 2015.

Los dilemas de la paz en http://www.semana.com/nacion/articulo/los-dilemas-de-la-paz/426070-3

Sobre víctimas, verdad y justicia no hay acuerdo todavía porque gobierno y guerrilla se enfrentan a difíciles dilemas morales y políticos.
 Los dilemas de la paz Foto: Marco cequera
El próximo 16 de mayo se cumplirá un año desde que la Mesa de Conversaciones de La Habana produjo el último acuerdo, sobre solución al problema de las drogas. Desde entonces, los delegados del gobierno y las Farc empezaron a discutir el punto de víctimas y no han logrado salir de él. Y al parecer, todavía está crudo. En Colombia, la sensación es que en Cuba no se avanza. Más que estancamiento, lo que hay es un nudo gordiano que implica tomar decisiones con implicaciones morales y políticas muy fuertes.

El tema de víctimas se reduce, a la postre a dos asuntos: las verdades de la guerra y la justicia para los responsables de crímenes atroces. Tal como se esperaba, estos han sido los puntos más complicados de la agenda porque afectan directamente a las elites, tanto de las Farc como del gobierno, y porque implican asumir posiciones éticas frente al país. Son aspectos donde también está en juego toda la dimensión humana (e inhumana) de la guerra. Las partes se juegan su papel en la historia, y están frente al espejo de sus actos pasados, y las consecuencias de estos sobre su futuro. Estos son los entuertos del proceso de paz.

Dignidad vs. Seguridad jurídica

Tanto la guerrilla como los militares consideran que libraron la guerra por buenas razones. Las Farc no quieren ir a la cárcel porque se ven a sí mismas como rebeldes con causa, y no como delincuentes. Los militares, por su parte, no quieren ser equiparados a la guerrilla, porque consideran que ellos han defendido la democracia, y no atentado contra ella. Verdad y justicia, que son lo que demandan las víctimas, hieren, necesariamente, sus imaginarios de dignidad y heroísmo. Y las salidas a este dilema están divididas. Las Farc creen que una comisión de la verdad sería la mejor manera de hacer justicia, y enfrentar el pasado sin llegar a un castigo.

Para el gobierno debe haber castigo con “algo de privación de libertad”, pues así lo ha dado a entender la fiscal de la Corte Penal Internacional, Fatou Bensouda, y en ese sentido su apuesta es por una fórmula de justicia transicional para todos. Algo que no solo rechazan las Farc, sino un sector de los militares.

El problema es que mientras más dignidad se otorgue a los actores en la Mesa, menos seguridad jurídica tendrá el acuerdo en el tiempo. Si para las Farc es indigno ir a la cárcel, quedan expuestos a que los tribunales internacionales los llamen a rendir cuentas por desapariciones forzadas, masacres y reclutamiento de niños. Y los militares se niegan a aceptar la justicia transicional. Convencer a unos y otros ha resultado una tarea demasiado ardua. Encontrar una fórmula equilibrada y aceptable para todos puede tomar mucho más tiempo aún.

Los máximos responsables

El Marco Jurídico para la Paz contempla que se juzgue a los máximos responsables de los crímenes de lesa humanidad y de guerra. Encontrar a los máximos responsables de las Farc no es difícil, pues su estructura es muy jerárquica, llevan varios años como jefes las mismas personas, y sus peores actos han estado a los ojos de todo el país y las investigaciones judiciales ya tienen suficiente material probatorio.

Pero ¿hay máximos responsables del lado del Estado? Aunque para muchos en el gobierno es obvio que quienes estarán en el banquillo son los altos oficiales de las Fuerzas Armadas que se aliaron por ejemplo con los paramilitares, o que ganaron medallas a punta de falsos positivos; para un sector de los militares quienes deben sentarse ante la justicia son los ministros de Defensa y presidentes. Uribe y Santos, por ejemplo. Esta posición es compartida por las Farc.

Aunque el propio comisionado de paz, Sergio Jaramillo, ha dicho, incluso a los empresarios, que en la guerra hay responsabilidades compartidas, la verdad es que un escenario como los juicios de Nuremberg, donde fueron juzgados nazis civiles, es no solo improbable en Colombia sino absurdo. No obstante, esto no quiere decir que no haya un problema, al que el expresidente César Gaviria le quiso salir al paso con su propuesta de perdón y olvido para todos, y el debate sobre el referendo para darle facultades al presidente para reglamentar por decreto el Marco Jurídico para la Paz. Sin embargo, por ahora no hay clima para un debate de estas características en el país, y este seguirá siendo uno de los mayores escollos para salir del punto de víctimas.

De Santos a Timochenko

Como ha dicho el analista León Valencia en varias ocasiones, la guerra consiste en quitarle legitimidad al adversario, mientras la paz consiste en otorgársela. En medio de la guerra, ministros y presidentes, con razón, han tratado a la guerrilla de terrorista y narcotraficante. La guerrilla a su vez, de tirano, corrupto y asesino al Estado. A estas alturas, ese lenguaje de la guerra, estigmatizador y polarizante, debería ir cambiando, para ser reemplazado por uno que facilite la paz y la reconciliación. No ha pasado porque las sensibilidades del país obligan a que ambas partes tengan un doble lenguaje: uno adentro de la Mesa, donde hay más confianza y sinceridad; y otro para la galería.

A eso se suma que tanto guerrilla como gobierno tienen más problemas con sus propias tropas de lo que se esperaba. Santos no ha podido convencer a ciertos sectores militares y del establecimiento económico y terrateniente de que la paz requiere cambios y reformas. Las Farc, a juzgar por el trágico ataque del Cauca que dejó un saldo de 11 soldados muertos y que violó el cese unilateral del fuego, tampoco tienen alineadas a todas sus tropas.

El problema es que, como lo señaló Daniel Coronell en su columna de la semana pasada, los destinos de Santos y Timochenko hoy en día están atados y necesitan darse mutuamente legitimidad en aras de una paz duradera.

Miedo al pasado, miedo al futuro 

Los seres humanos hacen la guerra, y la paz también. En ambos lados de la Mesa hay miedo a enfrentar el pasado, a reconocer que se cometieron crímenes terribles que no tienen ninguna justificación. Pero también hay miedo al futuro. Las Farc, aunque desprecian las encuestas como una manipulación de la oligarquía, tienen sin duda temor a salir a la calle y ser linchados por una opinión que los odia. Muchos militares también tienen temores: a perder poder, protagonismo y presupuesto. La paz exige un ejercicio de imaginación moral colectivo para el futuro y no solo lavar las culpas del pasado. No se trata solo de un pacto político de los partidos y sectores decisivos sino de construir una idea de porvenir posible. En esa idea de sociedad reconciliada, los implicados en la guerra, guerrilla, y militares deben tener la certeza sobre cómo les irá, de que tendrán un lugar en ese futuro y no una incertidumbre perpetua. Algo que no es fácil de lograr en ninguna negociación.

Factor tiempo vs. Metodología

Cuando comenzaron las conversaciones el presidente Santos dijo que esta sería una negociación de meses y no de años. Sin embargo, ya va por el tercer año y el fin no se ve cerca. El problema con la prolongación del tiempo es que una metodología basada en la confidencialidad, la lejanía, y el aislamiento empieza a erosionar el proceso cuando la negociación tarda años. Y, ponerle plazos como ha ocurrido en el pasado no es la solución.

La manera de superar este impasse ha sido trabajar en paralelo otros puntos de la agenda, como el desescalamiento del conflicto. Pero se necesitan otros saltos cualitativos. A lo mejor, el acercamiento con el senador Álvaro Uribe, y con los sectores más críticos, permitirá que se pueda hablar de temas tan espinosos como la verdad y la justicia, sin temor a ser acorralados por la opinión pública. Y ventilar propuestas audaces que nadie se atreve a hacer en un clima tan tenso, pero que son cruciales para darle celeridad al proceso de paz.

2015/05/07

Agenda...(y 900 millones)

La agenda es la forma en que priorizas y organizas tu tiempo. Todos hacemos una. Tu energía fluye hacia donde diriges -consciente o inconscientemente- tu atención. Algunos la tienen semanal, mensual, semestral, anual…quinquenal: tal vez el universo tenga una agenda que nunca será medible en tiempo humano, de hecho: ¿te has preguntado qué es “el tiempo”?.

Durante muchos años: el 9 de junio serán 24, en mi agenda ha estado “escribir la columna”. La mayoría de esos años han sido en medio de la disciplina rigurosa del compromiso semanal o quincenal con un codirector o un editor. A ningún columnista en el eje cafetero -que sepa- le pagan y como tal uno debe encontrar para qué escribe. Un colega que leo (…) me “dijo” por Whatsapp “a) Para convencer de algo al lector b) Para poner por escrito un juicio personal y validarlo con la opinión de terceros. c) Para denunciar”. Durante mucho tiempo, especialmente en los 10 años que estuve en El Diario colega, lo hacía para cuestionar al lector. Las columnas cerraban diciendo: ¿Y usted qué piensa? ¿Qué hará? Etc… pero mi agenda ha ido cambiando: pasé los 25 soñadores años que tenía en aquel entonces. ¡Que lindo era! ¡Todos los jóvenes son tan lindos!...(ejem).

En ese instante de mi vida me proponía tocar al ser humano en lo racional. Hacerlo pensar. Hacerlo reflexionar. Cada vez me convenzo más que eso es muy relativo. Si te leen –la verdad es que los impresos luchan por ser leídos…y de los impresos muchas veces los columnistas perdieron la pelea por ser leídos- …si te leen puede que la persona le quede ahí en alguna neurona una reflexión pero dudo que seamos capaces de agitar tal cantidad de neuronas para  que transformen su posición. Ejemplo: una señora corrupta y su marido, primero dudo que nos lean, y segundo, seguirá siendo corruptos. A lo peor afinan…su corrupción.

He llegado a una conclusión. Puede diferir de la suya. Y es que cada ser humano ha de vivir lo que ha de vivir. Y ha de morir lo que ha de morir. Y que son más los procesos emocionales y espirituales, que los racionales, los que facilitarán esa evolución. Empero, también creo lo que dice Prabhupada “el placer ya está almacenado”...(averigüe qué quiere decir eso…si quiere).

Es decir, mi agenda cambi…a… estoy en una transición que puede tomar semanas o años, por eso aún no coloco “cambió”…pero lo claro es que mis prioridades están cambiando. Esta columna cada vez más buscará “tocar” ya NO desde la racionalidad –cada vez más creo que es perder el tiempo- sino desde la emocionalidad y la espiritualidad a quienes la leen. Los invito, desde ahora a que dejemos de perder el tiempo, a que hagamos algo más profundo con ésta vida que nos han dado (…) a conectarnos con aquello que trasciende: la emoción y el espíritu.

***

Pasó otro mes, van  84…¡84! en que miles de Pereiranos perdimos 900 millones de pesos (2.376 millones según http://ow.ly/Lg30s ) pues siguen sin resolver “el ‘cuello de botella’ multimillonario” de la integración del transporte: ow.ly/Lg4wM .El tema prioritario MEGABUS nunca ha sido Promasivo ¡es la integración! ¿qué hacemos Sr Procurador? Dr Juan Guillermo Ángel, ahora que está en esa junta: ¡salve usted la integración!

Una versión avanzada fue publicada en http://www.latarde.com/opinion/columnistas/orlando-parra/150393-otros-900-millones-y-agenda 

2015/04/24

Trascender

Nadie sabe de qué tamaño es el universo. Absolutamente nadie. Se dice que pueden ser 300.000.000.000 (trescientos mil millones) de galaxias. Cada una con 1.000.000.000 (miles de millones) de soles o sistemas solares. Y allí, en alguna parte, hay un micro-millonésimo sistema solar donde hay una forma de vida llamada “humanos”. Y algunos de ellos quieren trascender: “Dicho de los efectos de algunas cosas: Extenderse o comunicarse a otras, produciendo consecuencias” “Estar o ir más allá de algo”. Otros simplemente hacen las cosas de tal manera que trascienden. Va un ejemplo.
1.400 años antes de Cristo - -hace unos 3400 años- en Egipto, los faraones gobernantes querían trascender y pretendían hacerlo dejando unas enormes pirámides, haciendo obras majestuosas. Dudo mucho que usted recuerde el nombre de esos faraones ¿los recuerda?. Se recuerdan y ven las pirámides pero hasta ahí. Los señores realmente nunca trascendieron. Pero en esa misma época existió un señor que hizo cero obras físicas. Cero. Y ese señor sí lo recordamos hasta nuestros días: Un tal Moisés…ese si sabe quién es ¿cierto?. ¿Cuál es la diferencia entre Moisés y los faraones?...sencilla: el servicio a las personas del común.
Va otro ejemplo. En el Sur Occidente de la India, en la provincia de Kollam se relata como hace unos 2000 años llegó un carpintero, un tal Tomás apodado Dídimo, proveniente de lo que hoy sería Israel y un Rey lo contrató para hacer palacios similares a los que había en su región de origen. Le dio el dinero y marchó a una expedición con la promesa de que al regresar tendría su palacio. El carpintero tomó el dinero y lo repartió entre los más necesitados. Al regresar, el rey pidió su Palacio (su obra faraónica) y el carpintero le dijo que al repartir su dinero entre los pobres se había construido un enorme palacio en el plano espiritual, en los cielos. El rey ordenó matarlo. Pero, paralelamente, el hijo del rey entró en coma, murió y revivió, al hacerlo contó a su padre que al morir había visto el palacio que el carpintero le había prometido. El rey entendió, asumió, y el carpintero siguió su camino. ¿Cuál es la diferencia entre los dos palacios?...sencilla: el servicio a las personas del común.
Hay más ejemplos…los grandes personajes de la humanidad que han trascendido son esencialmente los relacionados con la gente, con las personas, más los que las han servido, que los que se han servido de ellas, casi ninguno está asociado a descomunales obras físicas: Mahoma, Newton, Jesucristo, Buda, Teresa de Calcuta, Simone de Beauvoir, Gandhi, Luther King, etc… además nunca se propusieron “trascender”… se propusieron “servir”… y especialmente servir a los más necesitados.
En el planeta, en Latinoamérica, Colombia, Risaralda, Pereira, aquellos que el universo ha puesto en posiciones de influencia (también cuando quiera se las quita) si sirven a las personas del común más que a promover obras físicas, si se conectan a su esencia espiritual…trascenderán: está en ellos y ellas hacerlo.
Publicada el Jueves 23 de Abril de 2015  en http://www.latarde.com/opinion/columnistas/orlando-parra/149760-trascender 

2015/04/17

#Gabo...Pobre...No tenía quien le...mandara un cheque

RECTORES, MINISTRA, SECRETARIA ¿Y LA CÍVICA?

Señores Rectores, Gina, Patricia, Estatuas de sal. En eso pareciera que se están convirtiendo los instrumentos contemplados en la Constitución y en la ley para el ejercicio de la autoridad en Colombia. Porque hay normas en el papel, gobernantes con poder, funcionarios con decretos, policías con bolillo y jueces con atribuciones, pero en la vida cotidiana poco se sienten y la autoridad parece adormecida. Ya no se trata de la célebre frase que tuvo origen en tiempos coloniales según la cual ‘la ley se obedece pero no se cumple’. El fenómeno es más grave y profundo, y mucho más tangible.” Decía un reportaje sobre toda nuestra Colombia hace unos días la revista Semana. http://ow.ly/LCxOT . Nuestra ciudad hace parte de éste caos. Veamos:

*Porcentaje de Pereiran@s que consideran que los residentes de Pereira se comportan bien o muy bien frente al cumplimiento de las normas de tránsito. Años 2011 a 2013: empeoramos de un pésimo 341 de cada mil a 249 de cada 1000: 92 ciudadanos que antes cumplían las normas de tránsito ahora creemos las incumplen.

*Porcentaje de Pereiran@s que consideran probable o muy probable ser castigado o amonestado por infringir las normas de tránsito. Años 2011 a 2013  empeoramos pasando de  un preocupante 491 de cada mil que creían que sí a 387: creemos que 104 personas que antes creían que podían ser amonestados, dejaron de creerlo.

*Porcentaje de Pereiran@s que consideran que los residentes de Pereira se comportan bien o muy bien frente al respeto de las normas ambientales. Años 2011 a 2013 bajamos de un desastroso 385 de cada mil a 199 …¡otros 185 menos!

*Porcentaje de Pereiran@s que consideran que los residentes de Pereira se comportan bien o muy bien frente al cuidado y uso de los espacios públicos. Años 2011 a 2013: Bajamos de un 348 a 216 por cada mil...o sea de 652 a 784 creemos poco les importa el espacio público.

*Porcentaje de Pereiran@s que consideran probable o muy probable ser castigado o amonestado por no pagar impuestos. Años 2012 547 creían que si ya para 2013 baja a 451  (sobran los comentarios: hágalos usted)

Hay otros datos que asombran:

*Porcentaje de Pereiran@s que consideran que los residentes de Pereira se comportan bien o muy bien frente al respeto por la vida. En 2013 de cada cien sólo 29… 71 NO!

*Porcentaje de Pereiran@s que consideran que los residentes de Pereira se comportan bien o muy bien frente al respeto por los niños y niñas. En 2013 de cada mil sólo 363 …637 NO!

*Porcentaje de Pereiran@s que consideran que los residentes de Pereira se comportan bien o muy bien frente al respeto por las mujeres. En 2013 de cada mil sólo 333 …667 NO!.

Y uno curioso pero entendible:

*Porcentaje de Pereiran@s que consideran probable o muy probable ser castigado o amonestado por portar armas. Años 2011 a 2013: estables 556 de cada 1000…igual hay 444 que tampoco lo creen.


Rectores, Gina, Patricia…¿estamos asistiendo -en parte- al resultado del haber permitido que Civismo y Urbanidad se volvieran áreas “opcionales” en nuestras escuelas y colegios desde hace 21 años? Valorados pongan ustedes su grano de arena: recuperemos -al menos- la “materia” de Civismo y Urbanidad: https://civicayurbanidad.wordpress.com/ ¿o cuál será su aporte para revertir en algo éste despeñadero que nos arrasa a todos por acción u omisión?...ole y usted lector ¿qué hará?...

Una versión preliminar fue publicada en www.latarde.com 

2015/04/09

Carlos Gaviria Díaz

4 ABR 2015 - 7:53 PM
Homenaje familiar

Carlos Gaviria Díaz, ‘El Papá’

Ana Cristina, Natalia, Juan Carlos y Ximena, hijos del fallecido exmagistrado, se despiden de su padre.
Por: Especial para El Espectador en http://www.elespectador.com/noticias/politica/carlos-gaviria-diaz-el-papa-articulo-553225 

Es difícil expresar de manera pública la concepción sobre nuestro querido padre (‘El Papá’, como le dijimos siempre), en medio del dolor profundo que sentimos por su partida. Nos abruma exteriorizar nuestro duelo. Lo entendemos, porque reconocemos que fue un hombre público que dedicó su vida a defender desde diversos escenarios los derechos sociales e individuales, la libertad y la igualdad.
Reivindicamos que siempre hubo coherencia entre su vida pública y privada. El respeto por la autonomía y la dignidad personal, así como el dolor por la desigualdad y las exclusiones, siempre fueron temas de nuestro ritual en torno de la mesa del comedor y principios rectores de nuestra educación.
Siempre fue consciente de que defender sus principios tenía un oneroso precio, y que ese podía ser el de su vida, como lo comprendimos con resignación. A su lado tuvimos que soportar difamaciones, calumnias, persecuciones, que nos causaron profunda pena, tal como sucedió cuando se pretendió afirmar su simpatía con grupos al margen de la ley. Infamia manifiesta, puesto que siempre –incluso, claro está, desde el interior del hogar- rechazó cualquier forma de violencia.

Exaltamos que nuestro padre logró ser lo que se trazó desde su juventud: un profesor, o mejor, un maestro. Palabra que en su caso no corresponde a un formalismo. Sus discípulos, sus amigos y sus hijos le reconocemos esa condición. Nuestro padre sabía que la palabra desprendida del gesto que enseña, es una palabra vacua. Eso era él, un profesor honrado, una persona transparente, un idealista, un hombre ajeno a las mañas de la política (o de la politiquería, en nuestro medio). Por ello nos causó preocupación su incursión en el ámbito de la política nacional, tan distante en su praxis de su forma íntegra de actuar.
‘El Papá’ fue un hombre racional, pero extremadamente sensible y nos trató siempre con un enorme cariño. El respeto por nuestras decisiones, nuestra autonomía y nuestra independencia, fueron para él principios irrenunciables. Por ello nos enseñó a aceptar nuestras diferencias y a fortalecer nuestro fuero interno, parámetro fundamental para obrar de forma ética.
Predicaba y actuaba desde la decencia, su gran obsesión. Cualidad que traslapaba con la sensibilidad, que lo acercaba a sus amigos en sus conversaciones infinitas, que lo hacía sollozar al discernir sobre una novela entrañable, o al escuchar algunos versos o piezas musicales. La misma que desplegaba en su trato sincero a las personas que trabajaban con él.
La relación con nuestro padre estuvo signada por el afecto infinito. Afecto verbal y afecto físico: los besos (a su mujer, a sus tres hijas, a su hijo, a sus nietos, a su nuera y a sus yernos), las caricias (de las que todos fuimos permanentes destinatarios), las palabras bellas y tiernas.
Su erudición fue polifacética y abrumadora. Su saber no era una pretensión inocua. A través de ella nos inculcó el disfrute de la vida. De lo profundo, pero también de lo mundano: la filosofía, la literatura, la música, la pintura; pero también el buen comer, el vino e inclusive el fútbol. Fue consecuente, y hasta el día anterior a su hospitalización se gozó la vida, se gastó la vida.

Dignificamos su admiración profunda por nuestra madre (‘La Mamá’), la que evidenció hasta su último aliento. Alguna vez expresó que no era posible encontrar una persona que escuchara más que María Cristina. Y este pequeño homenaje también es para ella, porque siempre fue su cómplice irreductible, ante todo en las situaciones adversas.
Nos embarga un infinito dolor por la ausencia de nuestro padre, y nos duele que no vaya a ser testigo directo de la conclusión del proceso de paz, que fue una obsesión permanente en su vida. Nuestro antídoto será guardar su afecto y sensibilidad en nuestro corazón, allí donde nunca va a morir.