En afirmar que “Pereira es una
ciudad de refugiados” de “desplazados” coincidimos con Leonor Mary Marmolejo,
James Fonseca y Omar Buitrago, el pasado domingo en
#SinceramenteConOrlandoParra. Si, así es.Somos una ciudad fundada por arrieros zarrapastrosos. Los abuelos de
algunos quienes hoy le preguntan a uno “y vos que apellido es que sos” (…)
Alguien debe tener el dato de
cuántas personas llegaron desplazadas en las violencias liberal-conservadora;
cuántas llegaron desplazadas en las más recientes. A la cual se le debe sumar
los desplazados culturo-económicos. Árabes, judíos. Una ciudad de desplazados.
Solidarios generalmente.
En esa ciudad floreció “el
civismo”, cabe anotar que NO fue la única: sociedad de mejoras públicas hubo y
hay en muchas partes.Un civismo que
como dijo Fonseca, tuvo su momento de quiebre con la oleada del narcotráfico de
los 70 (Léase el libro “Los Jinetes de la Cocaína”); el dinero fácil debilitó
la solidaridad y sus valores esenciales en las gestas comunes, cívicas, que
fueron reemplazadas por los intereses de pequeños grupos, por mafias de diverso
tipo entre ellas las de la corrupción.Corrupción que como se quejó el director ejecutivo de Vigía Cívica, aún
NO es condenada por la comunidad, por la sociedad pereirana. Empero, los 3
charlantes afirmaron que el civismo está “latente”, lo que necesitamos son
nuevos dirigentes (“nuevos” NO necesariamente es “jóvenes”, por cierto). Se
necesita un civismo siglo XXI, civismo moderno, es decir, un civismo más
ciudadano del común (…)
Estos 157 años le llegan a la
ciudad con la preocupación por la necesidad de empleo, de ingresos, en lo que
coincidieron los foristas, pero enfatizando en que debe sujetarse a la
prioridad de la vida, que son preferibles las ayudas económicas. Afirmaron que
buena parte de los Pereiranos han sido díscolos, irresponsables, han incumplido
la bio-seguridad, e insistieron en que el COVID se enfrenta esencialmente desde
el auto-cuidado. Empero manifestaron que hay protuberantes fallas en las
autoridades policiales “no están haciendo lo que deben hacer”. Advirtieron que
es posible una expansión del microtráfico y con ello de violencia y que se
avecina una Crisis Humanitaria, la cual se debe enfrentar.
Abordaron el abandono del campo: los
productores cuentan con algunos programas de fomento que si bien los apoyan,
también es cierto que son acciones aisladas, discontinuas, cortoplacistas al
punto de que los programas de seguridad alimentaria no han generado el arraigo
y el impacto que su espíritu encierra. Existen tímidos avances en el POT,
asignación insipiente de recursos en el presupuesto público, carencia de
políticas integrales y coordinadas con actores competentes que incluyan
vivienda, vías, educación, salud, tecnología, comercialización; soluciones
oportunas sobre tenencia de la tierra, la formalización de la actividad
agropecuaria, estudios de suelos, fortalecimiento de su vocación…
En medio de semejantes situaciones la
mala copia de Barranquilla con su “Capital del Caribe” se vuelve tema
recurrente. Con los foristas somos enfáticos: ¿Capital del eje? ¡primero
apoyemos los municipios de Risaralda!. Por el contrario, lo que debemos hacer
es recuperar el simbolismo de “Ciudad- Región” que en algún momento tuvo
fuerza. Recordar que “estamos pegados”. Potenciar la RAP. Lo que necesitamos es
ponernos de ACUERDO SOBRE LO FUNDAMENTAL (difícil a nivel nacional), metas a
largo plazo … ¿qué tal una Asamblea Constituyente Municipal? … ¿De blancos,
negros - ricos, pobres, clase media?
Si alguien tiene un
patrimonio de un millón de dólares es "rico" en cualquier parte del
mundo. ¿Qué pensar de los 33 millones de dólares, es decir unos 100 mil millones
de pesos Colombianos, que cobró un presidente Peruano en una "coima"
por una mega obra? Se sabe que estos mismos señores actuaron en 10 países,
incluido Colombia. https://es.wikipedia.org/wiki/Caso_Odebrecht
En otros países ya hay hasta Presidentes de la República detenidos. Aquí, a lo
máximo que se ha llegado es a un ViceMinistro. ¡Vergonzoso!
Vamos más allá: ¿cómo es
posible que una empresa sea capaz de pagar tal coima por quedarse con ese
contrato y además le queden ganancias? ¿cuánto es el sobre precio, el sobre
costo en las obras públicas en Latinoamérica, en Colombia, aquí, como para que
les alcance para pagar coimas y obtener ganancias?. Cada obra que es licitada
en 100 millones de pesos, entonces, ¿realmente cuánto vale? 50? 30? ¿en cuánto
se inflan los costos? Alguna vez un siniestro personaje local hoy en un alto
cargo público (…) me dijo que si valía 10 se cobraban 20! De ese tamaño es el
ROBO!.
Sólo gobernantes
honestos, presidentes, alcaldes y gobernadores que realmente son los
"ordenadores del gasto" pueden frenar esta vulgaridad con los
recursos públicos, con los impuestos que desde el más pobre hasta el más rico
pagamos; sin olvidar que hay alcaldías y gobernaciones donde cada secretaria o
descentralizado parece un feudo de un diputado o concejal: mucho cuidado
también con ellos.
Éste
año hay elecciones: Es supremamente importante que revise en detalle quiénes
son los candidatos, cuál es su historia de vida, quiénes son las personas más
cercanas, quiénes son sus familiares; para que vote a consciencia, pues siempre
hay candidatos y candidatas decentes: ayúdeles, apóyelos, vote por ell@s!
(nunca deje de votar! los únicos beneficiados son los corruptos que saben que
su voto jamás lo hubieran podido comprar: ¿ya inscribió la cédula?).
DOSQUEBRADAS: 60 mil biquebradenses votaron la consulta
anticorrupción, son 16 mil más que los que eligieron el último alcalde ¡son
capaces! de cambiar un municipio dónde desde hace años, lustros, décadas, se
sabe que está plagado hasta los tuétanos de corrupción. Ojalá los candidatos
alternativos a la alcaldía sean capaces de aunar esfuerzos armando equipos
administrativos honestos y ojalá, se elijan unos buenos y NUEVOS concejales.
En 1998, tras charlas con JB Londoño –a quien también rindo homenaje aquí- creamos Pereiranos por la Paz y allí con Patricia Salazar, ¿Carlos Arturo Caro? Alebetanji y otros –con la bendición del hoy encargado de la visita papal, Monseñor Suescún- se creó una comisión de ética que evolucionó a Risaralda Ética, y de allí a Vigía Cívica: https://www.facebook.com/vigiacivicaa/.
En algún momento conocí a James, al CIUDADANO: “…miembro activo de un Estado, titular de derechos políticos y sometido a sus leyes”. Lo que sí recuerdo es que he tratado de aprehenderle.
-Creía que la corrupción (en Occidente) era Colonial, del medioevo, pero James cuenta que es más antigua: “ya desde el Imperio Romano hubo escándalos de corrupción que salpicaron el Senado y causaron el asesinato de Julio César. Entonces, como medida extraordinaria inventaron las APP y privatizaron las vías que en algunos puntos del imperio construían y mantenían los privados e, increíble, privatizaron el ejército. Cualquier privado armaba su legión y a su costa la mantenía e iban a la guerra en nombre del imperio y con el dividían el producto…”
-¿Sabía que en Cacombia, digo, Colombia, la corrupción NOOO es delito?…¡sí! …y entonces ¿por qué hay tanto encanado?: “Están penalizadas la celebración indebida de contratos y el cohecho. Pero la corrupción, como tipo penal NO lo tenemos. Entonces casos tan graves como las puertas giratorias, NO tienen sanción penal, porque no hay aprovechamiento económico directo. Los favores a los amigos son actos de corrupción, pero si NO hay contrato o dádivas probadas, NO se configura el delito. Las violaciones a las normas de inhabilidad solo se sancionan con multas y eventualmente con destituciones…” ¡!
Larga vida a James, a Vigía Cívica, a los Néstor Arango, Roberto Gálvez, Luis Fernando Gaviria, las Leonor Mari Marmolejo, y otros (as) que han sabido proteger a este ciudadano, y a ese esfuerzo, incluso de aquellos (as) a quienes les duele mucho que les desaprueben y -por ello- confunden sus tareas cívicas con sus ejercicios personales: “Debe ser un asunto de Ego”: ¡pranayana estimados (as)!
POR AHORA: ¿Hasta cuándo se permitirá la privatización diurna y nocturna de vías -especialmente las usadas por el transporte MÁS SUSTANCIAL: el público!- por quienes se niegan a entender que (ya) deben tenerles o subsidiarles parqueaderos a sus clientes?
La Alianza Democrática M19 tenía una sede en la 4ª entre calle 14 y 15. Sede que pagaba Luis Enrique Arango Jiménez. Alguna vez vi entrar a una persona elegantemente vestida, alto, flaco, sonriente, amable, que se dirigió a la oficina de Luis Enrique. Corría el año 1991, esa fue la primera imagen que tuve de Crosthwaite.
Si mal no recuerdo le pregunté a nuestro candidato a Cámara quién era el señor, y me habló muy bien al respecto. Ni idea de cómo ande esa relación hoy. Pocos años después, 1994 Carlos Alfredo (casi nadie le dice así, ni escribe correctamente su apellido) se lanzó al concejo municipal y salió. Fueron las elecciones donde Juan Manuel Arango fue electo por primera vez alcalde. Armó el grupo de los cuatro: 4 concejales recién llegados al circo que era el concejo en ese entonces. Eran Adalberto Sanchez, Mario Marín, Crosthwaite y la señora Zapata que por cierto fue, parece, la primera electa por un movimiento verde en Pereira. En la oficina de Carlos Alfredo en el concejo casi nunca había gente, lo que si había era un enorme letrero que decía: aquí no se dan ni puestos ni contratos, NO somos clientelistas, o algo parecido. El vaticinio era que hasta ahí le iba a llegar su carrera.
Desde ese entonces (¿o antes?) comenzó una interminable cadena de denuncias sobre hechos que él, y otros, consideran corrupción. Es decir, lleva 20 años en un ejercicio que generalmente lo deja solo a nivel de personalidad pública pero nunca lo deja así electoralmente pues tiene bien que mal contados 5 mil seguidores. Por ejemplo, mi familia generalmente ha votado por él desde esos años. En el 2004, cuando desde mi candida-tura al Concejo hice llave con Crosthwaite a la asamblea, sacó una de las mayores votaciones: 6844 votos, pero al no entender la nueva mecánica electoral, NO repite curul. Luego comete el peor error de su carrera: hacer parte de una lista financiada y respalda por aquellos a quienes había combatido y su votación se desploma. En las pasadas elecciones, recuperada su credibilidad, alcanzó 8016 votos para la alcaldía de Pereira.
No ha habido un solo Alcalde o Gobernador relacionado con su gestión que no haya terminado “subiendo escalas” como le dicen al “ejercicio” de visitar “las ías”, la contraloría, la procuraduría, incluso la fiscalía. Juan Manuel Arango, Duque, hasta Martha Helena, Elsa Gladis, Juan Manuel (II), Israel, secretarios, gerentes, sus colegas en el Concejo y en la Asamblea, etc., han tenido que hacer el ejercicio. ¿Cansón? ¿Intenso? ¿pelea hasta con la sombra? ¡No señor! ¡NECESARIO!
Si un reciente ex-secretario de la alcaldía de Pereira y luego de la gobernación de Risaralda dice en público: “Dígame quién es su padrino político (ojalá no lo tenga), y le calcularé cuánto roba al Estado” (en http://ow.ly/gXB2t ) es porque esto está más podrido de lo que uno percibe.
Creo que pocas personas como él conocen el funcionamiento de la llave MegaContratistas + Gobernantes y menos aún tienen su ventaja moral: Carlos Alfredo NO es comprable. Entre quienes entienden esa “llave” (lea aquíhttp://ow.ly/h1VPG) algunos lo utilizan para chantajear a los gobernantes, a los formales y a los reales, y éstos, simplemente, los compran con gabelas o los presionan: a Crosthwaite le hicieron un atentado con una manopla de hierro que cruzó el parabrisas de su carro y le voló los dientes. El lío para los que atentaron contra él fue que lograron que sonriera menos, ¡pero lo dejaron con más dientes!…
¿Qué formas hay para enriquecerse en Colombia? dicen que el exsenador Martínez dijo que era más rentable controlar una Secretaria de Salud, que llevar un cargamento de droga http://ow.ly/augHT ¿Se enriquece, entonces, más un corrupto que un narco? Pues según el “experto” citado, así es.
Tal vez desde la Colonia, se ha desarrollado algo espantoso entre buena parte de altos funcionarios estatales: “aprovechar el cuartico de hora” y ¡robar, robar! Todo lo que se pueda!...empero, lo que está claro es que en ningún caso son todos los altos funcionarios quienes se roban el erario, ese erario que se forma con nuestros impuestos, o, peor, con las deudas externas que adquieren los gobernantes y pagamos los gobernados.
Algunos se han ido lanza en ristre contra el señor Gonzalo Molina –lo he tratado una vez en mi vida, en una finca- y contra el señor Barragán –igual, lo he tratado una sola vez en mi vida: en un salón social de un edificio- porque ambos reciben “salarios integrales”: unos salarios donde la persona, por ley y proporcionalmente a sus honorarios deben pagarse su salud, su pensión, su ARP, aportar al fondo de solidaridad pensional, y tributar una rete fuente que puede llegarles al 33% ¡! … haga las restas entonces y calcule cuánto es realmente lo que reciben: es así como se deben ver esos “salarios”.(De hecho en el sector privado Risaraldense hay directivos mejor pagos).
Estos señores, qué pena, no NOS están administrando, A USTED y a mí, los ciudadanos que con nuestros impuestos somos los reales dueños de esas empresas, un “negocito”: UNE produce utilidades anuales por más de $11 mil millones, Aguas y Aguas tiene ingresos por más de $60 mil millones, una caja de más de 5 mil, utilidades por cerca de 3 mil millones http://ow.ly/auiwt ¿a quién ponemos a manejar esas empresas? ¿A personajes que se han ganado la absoluta confianza de sus jefes politiqueros porque han aprendido a “hacer vueltas”? ¿O a personas que tienen una alta formación académica, administrativa, y especialmente, moral y ética: esa que es tan escasa en este país del sagrado corazón? Escoja pues lector/a: ¿A quién ponemos? se la pongo más cruda ¿Qué mandato le dimos a Enrique Vasquez? ¿lo recuerda? HONESTIDAD! HONESTIDAD!! HONESTIDAD!!!
Imagino algo, a Molina lo empoderó en EPM un tal Sergio Fajardo sí, el mismo, y luego Alonso Salazar: dos símbolos de que en Colombia ¡SI SE PUEDE gobernar sin robarse un peso! Y al Sr Barragán le conozco una bien larga carrera administrativa que hace rato lo hace ministeriable y donde sí, es cierto, ha sido hombre cercano a Rivera, a Soto, etc, pero ¿le conocemos alguna condena por corrupción? Pues no. ¿Entonces?
Los funcionarios públicos, especialmente los ordenadores del gasto –hay Secretarios de despacho que manejan miles de millones- los que, digámoslo abiertamente, tienen la mayor tentación, todos deberían ser bien remunerados, acorde con el monto de los presupuestos que manejan. Que sus honorarios nunca sean excusa para corromperse.
Finalmente le hago una pregunta ¿usted prefiere que a una persona su junta directiva le duplique el sueldo porque tiene plena confianza en las calidades éticas y morales del señor, ó que esa misma junta directiva tenga que andar luego dando explicaciones sobre porqué un gerente, si bien se gana la mitad, maneja esa empresa pública como si fuera de su propiedad, y termina su gestión, entre otras, con mansiones? Respóndase esa “bobadita”.
Alguna vez mencionamos los resultados lamentables de un estudio hecho por una importante firma de investigaciones, sobre la percepción que tenían los jóvenes entre los 13 y los 18 años sobre el significado del bien y el mal. Las respuestas fueron aterradoras, pues los entrevistados entendían el mal como la eventualidad de que los cogieran en un hecho ilegal y no el hecho en sí.
Pues bien, lo que estamos observando es la construcción de una cultura de la ilegalidad que ya corroe los cimientos de la sociedad colombiana sobre lo cual no es necesario dar explicaciones. Basta mirar los periódicos diariamente y todos los escándalos que se publican para entender lo que estamos afirmando.
El Rector nacional de la Universidad Eafit, Dr. Juan Luis Mejía Arango, en notable conferencia de esta semana nos habla sobre esta cultura de la ilegalidad que se ha tomado a Colombia, en el marco de un trabajo académico que se denomina “Atreverse a Pensar” a través del cual EAFIT llamará a la reflexión para tratar de prevenir el estado actual de cosas. A la manera de las políticas de salud, es preferible prevenir que curar o reprimir.
La construcción de este estado de cosas ha pasado por la cultura popular, dice el Rector Mejia Arango: “Frases como “al que se vuelve miel, se lo lamben”, “antioqueño no se vara”, “por la plata baila el perro”, “la plata busca la plata”, “la ocasión hace al ladrón”, “hecha la ley, hecha la trampa”, son refranes que dan fe de una sabiduría popular propia, que inmovilizan el pensamiento y son aceptadas por buena parte de la sociedad…como un culto al avispado”. “Son una exaltación al pícaro mas no a la picardía”
Agrega el Rector en su texto: “El culto al avispado” es el que caracteriza a ese “vivo” que fue a la universidad de la calle, que no habla sino que come de cuento, que no hace negocios sino que saca ventaja, que se las sabe todas, que se enriquece rápido y que se cree superior a los demás. Por eso, surgieron fenómenos como el contrabando situación tolerada inicialmente y que fue, en palabras del directivo, la grieta ética por donde se coló el narcotráfico, producto de una incapacidad para construir una ética civil….. En fin, el colombiano promedio cree que mentir y engañar hacen parte del éxito en la vida. (Agencia de Noticias EAFIT)
La pregunta que es necesario hacer ahora es: “Puede la sociedad colombiana subsistir con este estado de cosas?. Veamos algunas percepciones: Colombia ante el Observatorio que mide la transparencia de los estados en el mundo ocupa el lamentable lugar 78, lo cual no construye confianza entre naciones ni entre inversionistas internacionales potenciales. El país se percibe como un país con poca transparencia en sus negocios.
La Auditoría General de la República estima que la corrupción puede producir 3.8 billones de pesos perdidos, lo cual equivale a los resultados de una reforma tributaria.
Los empresarios en un 60% consideran que los negocios con el estado no son fáciles ni transparentes. El 67% de ellos considera que la confianza ciudadana en las instituciones del estado está resquebrajada. Sólo el 7% de los empresarios considera que los recursos para la reconstrucción nacional, a raíz de la reciente tragedia invernal, serán bien invertidos. El 42% cree que la corrupción en el estado dificulta el clima de los negocios.
De otra parte la cultura del no pago de los impuestos mina la economía nacional. La Tasa de Evasión de Impuestos representa el 25.3% del debido a cobrar. El IVA dejado de pagar equivale al 2% del PIB.
En cuanto al riesgo electoral: 544 municipios están en grave riesgo de fraude electoral. 447 municipios están en grave riesgo de violencia durante el proceso. 241 municipios pueden sufrir ambos fenómenos.
Todos estos datos que aporta la conferencia mencionada, servirá para una propuesta concreta de EAFIT, en la cual se planteará que la sociedad debe reflexionar y actuar a través de procesos de educación ciudadana, en una cultura de la legalidad, antes de que sea demasiado tarde. Un país como el nuestro no puede aceptar el robo continuado de los recursos públicos, mientras ve avanzar la pobreza sin atenuantes. El mundo será cada vez más interdependiente y no podemos ser parte de los países parias que nadie respeta.