Quienes son atentos a lo que pasa con la “Empresa Pereira”, son conscientes que nuestra “Junta Directiva”: el Concejo Municipal ha elevado su nivel. Que tenemos excelentes Concejales, por cierto, en los dos bloques. Si tuviéramos los concejales que, en su mayoría, tuvimos, por ejemplo, hace unos 20 años, ni para qué les escribimos estas reflexiones.
El Centro de Atención Especializado CREEME Marceliano Ossa, está a punto de costarnos otra vez 1200millones de pesos…pero realmente podría valer sólo 270 millones…¡1000 millones menos!...4.000 millones que nos podemos ahorrar en cada administración justo ahora que andamos preguntando de dónde sacar plata para tanta obra necesaria y/o inconclusa.
¿Qué ha sucedido?... Durante siete meses la gerencia de la “Empresa Pereira”, es decir, la Alcaldía y la Secretaria encargada se dedicaron a entender esa entidad y comprendieron que entregando el funcionamiento del CREEME a un operador idóneo, experimentado y con acompañamiento técnico del ICBF, la inversión anual podría bajar de $1.200 millones a sólo $270 millones…y así se presentó entonces el acuerdo al concejo municipal, insistiendo, supongo, en que desde el punto de vista del control fiscal, esa documentada comprensión, en caso de negarse su acogida, se puede volver una prueba de posible detrimento patrimonial, pues los gobernantes y funcionarios estatales están en la obligación de AHORRAR.
¿De dónde sale la diferencia a favor del municipio? De que el ICBF a nivel nacional se comprometió a adicionar recursos que garantizarán el 100% de los cupos del Marceliano siempre y cuando la operación sea ejercida por una entidad que cumpla con las condiciones que garanticen la intervención efectiva de los jóvenes.
¿Y porqué NO los dan?...¡porque Pereira es el ÚNICO, ojo el ÚNICO, municipio de toda Colombia que aún cree que con una funcionaria de planta y con 40 o 45 contratistas (algunos por dos meses) puede operar un Centro de Atención Especializado!…¡así no llegamos a ningún Pereira!... Cómo lo dijo el Personero a los miembros de la Comisión de la Junta Directiva/Concejo/Municipal, el CREEME tiene como objetivo desarrollar y orientar un Plan de Atención que bajo criterios de verificación de derechos, integralidad, restauración, verdad y reparación, propenda por una preparación correcta y eficaz para la re-integración con la familia y la sociedad, de los adolescentes en conflicto penal y lo que todos tenemos claros es que ese objetivo difícilmente se ha logrado -aclaro- en décadas, por que el estado local, carece de un modelo, de un equipo interdisciplinario especializado que garantice el proceso…el problema es “de estado” lejos de ser un problema “puntual” de su actual personal seguramente, muy amables y queridos todos ellos…el tema va más allá, es de fondo.
Ahora, si “el tema”, como me lo dijeron algunas fuentes, son los contratistas o la funcionaria –algunos de ellos amigos míos- entonces lo debe resolver el área de recursos humanos de la administración municipal, máxime cuando seguramente ellos participarán en un serio y transparente concurso meritocratico con el nuevo operador y algunos serán contratados por éste.
Aún tenemos tiempo para ahorrarnos esa plata: el acuerdo, sugiero cordialmente, la administración de la “Empresa Pereira”, la alcaldía (y la secretaria) deben presentarlo de nuevo, puntualizando la argumentación a su Junta Directiva, el honorable concejo municipal, para su aprobación este año.
